El sexo y el estrés

El sexo combate el estrés, pero el estrés también combate el sexo, una práctica sexual sana definitivamente reduce los niveles de estrés en las personas, el sólo hecho de sentir placer y hacer sentir placer a la pareja contribuye a una sensación de bienestar que en gran medida ayuda a sentirnos mejor. Pero a la vez el estrés es un enemigo del sexo, en muchas parejas los altos niveles de estrés hacen que, tanto el hombre como la mujer, sufran de disfunciones a la hora de la actividad sexual, por lo que un encuentro amoroso puede convertirse en un problema más en vez de ser un momento de relax.

Las personas conviven con el estrés en todo momento, esto hace que no llevemos una vida tranquila y nuestra salud se vea afectada, tanto física como mental, pero si uno sabe llevar una vida sexual placentera y sana contribuirá a mejorar su estado de ánimo, volverá a las actividades diarias con más fuerzas y alegría, todo esto se relaciona con el hecho de que el sexo aumenta la oxigenación pulmonar, mejora la circulación, produce endorfinas y otras hormonas que elevan el estado anímico, y como todos sabemos un buen momento con nuestra pareja hace sentirnos más relajados y nos lleva a tener un sueño más profundo y placentero.

Pero si padeces de estrés y éste no te permite llevar una vida sexual plena, debes tomar en serio la idea de visitar aun especialista que te brinde la solución exacta, que siempre la hay, pues no hay nada más agobiante que salir de los problemas cotidianos y encontrar otro en la cama.

Hoy son muchos quienes sostienen que el sexo, más allá de su función reproductora, tiene beneficios en la salud en general, mejora el estado de ánimo, baja los niveles de estrés, por consiguiente eleva las defensas de nuestro organismo. Y hay que tener en cuenta que el acto sexual debe tener todos los ingredientes necesarios para que sea lo más placentero posible, esto implica, explotar al máximo los cinco sentidos, una comunicación total con la pareja que haga que ambos disfruten el momento íntimo.